La radio siempre ha sido una fiel compañía en el camino, de hecho una de las primeras cosas que hago cuando visito un lugar nuevo, es apretar el botón de “scan” del radio del carro, para escuchar los distintos sonidos y estilos de ese lugar. En los 80’s, sin Internet, y con un limitado presupuesto por la edad (en esa época mis ingresos venían exclusivamente de la mesada que me daba mi papá para la merienda del colegio), la radio era ese lugar donde descubríamos nuevos sonidos, grupos y canciones. Grabar la música de la radio para escucharla luego, un arte. “Sacar la letra” de esas canciones, una diversión.

Insisto, no existía Internet comercial, pero si tiendas de discos. Al comprar un disco “de pasta”, una de las más agradables sorpresas era ver que venía con un pequeño inserto, un folleto que traía la letra de las canciones. Y muchas veces me pasó, que escuchaba un tema que me encantaba, tiempo después lograba comprar el disco, y descubría que ese grupo o ese artista también era el que cantaba aquella canción que tanto nos gustó, y que solo pusieron una vez, muy tarde en la noche.

En esos días de estar “cazando” música nueva, pero ya un poco más grande, comenzando la universidad, escuché en la radio una canción que me encantó. Un tema que me recordaba algún sonido que ya había escuchado antes, uno de esos artistas que con el tiempo se convertiría en uno de mis favoritos. Escuchaba “I won’t back down”, de Tom Petty.

Tom Petty fue un creador lleno de sinceridad, una persona que definió parte del sonido del “rock californiano”, si lo pudiéramos llamar de alguna forma, a pesar de no haber nacido en California sino en Gainesville, Florida. Su música es parte del soundtrack de la vida de muchos de nosotros, y recuerdo especialmente que sus discos eran fantásticos para manejar por la carretera. Llenos de energía, y a la vez con melodías suaves, baterías muy rítmicas y el sonido limpio de la guitarra. Desde su preferida, una Fender Stratocaster del 64, a cualquiera de las Rickenbackers que usaba, (como la 660/12TP, diseñada por Petty).

Elvis y Los Beatles cambiaron su mundo.
Uno pudiera decir que “todo comenzó” en 1961, cuando tuvo uno de esos momentos que cambian la vida. Su tío trabajaba en el set del film de Elvis Presley “Follow that Dream” en Ocala, y un día lo invitó a ver la filmación. Allí conoció a Elvis, y de inmediato se convirtió en su fan. Años después, en una entrevista que dió en 2006, Petty comentó que el supo que quería estar en una banda en el momento en el que vió a los Beatles en el Ed Sullivan Show.

“Esa era la forma de hacerlo, hacías un grupo con tus amigos y creabas la música. Y se veía tan divertido, era algo con lo que me identificaba mucho. Era un gran fan de Elvis, pero realmente lo que vi en los Beatles era algo que yo podía hacer. Sabía que podía hacerlo. No pasó mucho tiempo antes de que aparecieran grupos por todos los garages”. 

A los 17 años salió de la escuela secundaria y montó su banda. De allí en adelante conocemos la historia.

De los Heartbreakers a los Traveling Wilburys, a los Heartbreakers de nuevo.
Su primera banda se llamó The Epics, luego evolucionó en Mudcrutch, y a lo largo de otras colaboraciones con músicos amigos, surgió la primera alineación de los Heartbreakers. Con ellos grabó sus éxitos más recordados, como American Girl, Refugee, Free Fallin, Runnin’ Down a Dream, Learning to Fly, Mary Janes Last Dance, y por supuesto, I Won’t Back Down. Pero otra alineación legendaria, de la cual solamente hay dos albums, fue The Traveling Wilburys, el grupo de George Harrison, que incluía también a Bob Dylan, Roy Orbison y Jeff Lynne. El tema “Handle it with care” se suponía iba a ser uno de esos lados “B” de un disco de George Harrison, pero el grupo decidió hacer un álbum completo, The Traveling Wilburys Volumen 1. Un segundo álbum, graciosamente llamada “The Traveling Wilburys Volumen 3”, fue grabado luego de la muerte de Orbison, en respuesta a una serie de sesiones piratas que estaban siendo recopiladas como el Volumen 2.

El pasado lunes 2 de octubre nos dejó sorpresivamente, luego de haber terminado un tour de conciertos por el 40 aniversario de The Heartbreakers, que finalizó con una presentación en el Hollywood Bowl el pasado 25 de septiembre.

Nos queda su música y su sonido incomparable: ¡hasta siempre!

You belong among the wildflowers
You belong somewhere close to me
Far away from your trouble and worries
You belong somewhere you feel free

Tom Petty, Wildflowers.